Pues resulta que la finca del Faro de Ajo está abierta para las visitas. Una reivindicación turística de la zona desde hace mucho tiempo que ha costado 52.000 € (80% gobierno de Cantabria, 20% ayuntamiento de Bareyo) y desde el primero de Agosto cuesta 1 € la entrada.
Nadie sospechaba nada de que su hubiese que pagar por entrar y la noticia a corrido como la polvora por el municipio. Ahora los vecinos tienen que pagar el euro de la entrada, su parte por lo puesto por el ayuntamiento y la parte que corresponde del Gobierno de Cantabria. ¿Que consiguen con esto? Que nadie del pueblo vaya más de una vez.
El caso es que a preguntas de un visitante sobre el precio nos ha comentado que él le gustaría ir todos los días pero si tiene que pagar, o salta a la finca por La Ojerada, o por La Escalera por donde supuestamente no hay control de acceso. -"¿Que me van a detener? Aquí no hay policía local" -nos comentó.
¿Donde va el dinero que se está recaudando? ¿Quién lo controla? ¿Quien lo cobra se lo queda?
Saludos ñeros.