El que no se consuela es por que no quiere. A El Diario Montañés le sirve que los demás periódicos que se veden o el que se edita en Cantabria (ALERTA) estén por debajo, para sacar pecho, aunque al hacerlo certifique lo que muchos pensábamos: que el rotativo del grupo vasco Vocento pierde ejemplares a chorro. Nada menos que 30.000 en el último año según el Estudio General de Medios (EGM). Los datos aportados por el propio Diario Montañes en recientes fechas confirma que tiene 173.000 lectores en base a la información del Estudio General de Medios (EGM). El periódico editado en el País Vasco ha tardado 15 días en ofrecer esa información a sus lectores y anunciantes y confirma así que con el traslado de su edición a tierras no cántabras está perdiendo gran número de ventas.
Por eso me atrevo a pronosticar que el día que los bares cántabros dejen de comprar el Diario Montañes, el día que la gente se de cuenta que el Diario Montañes es un bazar que vende fascículos a precio de oro y pulseritas del equilibrio, el día que sepamos el grado de manipulación informativa a la que hemos estado sometidos, ese día el Diario Montañes perderá su hegemonía.
Saludos Ñeros.
Hace 1 día
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