
Ni que decir tiene que la Finca del Faro de Ajo es un enclave natural poco transformado por la explotación u ocupación humana que, en razón a la belleza de sus paisajes, la representatividad de sus ecosistemas o la singularidad de su flora, de su fauna o de sus formaciones geomorfológicas, posee unos valores ecológicos, estéticos, educativos y científicos cuya conservación merece una atención preferente.
Dicho lo anterior, y reconociendo sin ninguna duda que merecería una figura de protección reconocida y no la sola protección que hasta ahora le ha dado la propiedad y ocupación pasiva de la Autoridad Portuaria de Santander, sería necesario y muy valioso para su conservación futura su protección por alguna figura de protección, ya sea Parque Natural, Monumento Natural o Paisaje Protegido, para defenderlo de los actuales ataques de la expansión urbanística, la destrucción de su naturalidad y del destrozo de la singularidad de sus ecosistemas, provenientes del afán especulador y humanizante de lo natural del nuestro alcalde y sus seguidillas.
Por eso desde aquí, protesto enérgicamente contra el proyecto del Parque de esculturas que el alcalde ha proyectado para la Finca del Faro, y abogo por la apertura del la Finca del Faro al disfrute público respetando su natural composición, su morfología y sus ecosistemas, no añadiendo nada más que la información que el lugar nos puede enseñar para el respeto y conocimiento de nuestro medio natural.
Saludos Ñeros.
Enlace recomendado FINCA DEL FARO