Allá por el mes de octubre el claustro del convento de San Ildefonso, en Ajo, presentó una imagen totalmente renovada una vez concluidas las tareas de limpieza y desbroce que se llevaron a cabo en el edificio durante septiembre y octubre.
A través de una subvención de la Consejería de Empleo y Bienestar Social, el Ayuntamiento de Bareyo contrató a cuatro desempleados del municipio que llevaron a cabo una labor de limpieza para eliminar toda la maleza que cubría tanto el interior como el exterior. Además, y para evitar que vuelva a nacer maleza en ese lugar, se ha cubierto el suelo de guijarro y geotextil pero conservando las losas de barro originales.
La recuperación del claustro del convento de San Ildefonso de Ajo, un edificio de gran belleza arquitectónica, ya que cuenta con 31 arcos de piedra y data de finales del siglo XV y principios del XVI, creo que es un punto de inflexión en la recuperación del patrimonio histórico del municipio de Bareyo que, que en este caso ha permanecido aproximadamente medio siglo abandonado.
Pero ¿De quién es el edificio? ¿Por que es necesario que para la recuperación de parte del edificio, ni no de su totalidad halla que hacer ningún convenio con la iglesia?
Considero que aunque legalmente se puede afirmar que el edificio de la iglesia se puede constatar que la iglesia lo ha abandonado en su mayor parte, y no se ha ocupado como debería de un singular lugar de gran valor.
Desde las autoridades locales esta visto que se lleva muchos años "pasando del tema", y ahora que parece que hay voluntad de reparación, se tiene que pasar por un acuerdo con la iglesia que con los años, solo pretende recuperar en buen estado un edificio que ha abandonado.
El hacernos a todos y todas pasar por la aceptación de un convenio para poder contemplar el patrimonio allí contenido lo entiendo como un secuestro de patrimonio por parte de la iglesia que se debería impedir de alguna forma.
Saludos Ñeros
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