En Cantabria, el PSOE ha retrocedido hasta los siete diputados y perdido la posibilidad de formar parte del Gobierno de Cantabria, en el que estaban desde 2003 en coalición con el PRC de Miguel Ángel Revilla, al obtener la mayoría absoluta, por primera vez en la comunidad, el Partido Popular, que además ha avanzado en representación municipal en ayuntamientos como Camargo o Torrelavega gobernados tradicionalmente por los socialistas.
Presidida por la secretaria general y vicepresidenta en funciones del Gobierno, Dolores Gorostiaga, la Ejecutiva regional socialista se ha reunido desde las seis de la tarde hasta aproximadamente las once de la noche para analizar los resultados electorales, en un encuentro en el que se han producido numerosas intervenciones, réplicas y contrarréplicas.
Los asistentes han decidido por unanimidad reproducir en Cantabria el modelo que adopte la dirección federal del partido para articular la sucesión de José Luis Rodríguez Zapatero, fórmula que se confirmará este sábado en el Comité Federal.
De esta forma, si en Madrid se opta por convocar elecciones primarias, en Cantabria se adoptará por la misma medida, y si finalmente lo que se elige es un congreso extraordinario, en la comunidad autónoma se hará lo mismo.
En la reunión de la Ejecutiva se han producido críticas al portavoz parlamentario, Francisco Fernández Mañanes, por sus declaraciones públicas reclamando un congreso extraordinario y hablando de un "fin de ciclo" en el socialismo cántabro.
También se ha hecho hincapié en la necesidad de volcarse a partir de ahora en la preparación de las próximas elecciones generales.
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