Son muchas las personas que tienen fiel reflejo de su
comportamiento en los
compartamientos de otras personas. Es casi seguro que habrá otra persona por ahí que tenga cierto
palarelismo con mi vida o con la suya, en este caso al que me refiero veo muchas semejanzas entre los
comportamientos de Ignacio Diego, presidente del
PP de
Cantabria y José de la Hoz, alcalde de
Bareyo.
Como ya saben ustedes, un lunes Ignacio Diego fue pillado por un
video de seguridad, que no recoge precisamente gestos y actitudes de un pacifico
urbanita, "
apachugando" un
purito del presidente
Revilla. Para mí no es esto lo más malo, para mi lo malo es que al día siguiente se hizo "el orejas" y miente a los periodistas, el
miercoles vuelve a mentir y solo reconoció la verdad el jueves.
Ignacio Diego tiene que explicar por qué mintió a los cántabros y
solo dijo la verdad cuando se vio descubierto.
Ahora le toca a De la Hoz, el alcalde de
Bareyo nunca habría tratado de disculpar su mal aparcamiento en zona azul, si no hubiese sido pillado. En vez de disculparse, en vez de pedir perdón por su
comportamiento, en vez de reconocer que lo han pillado, solo se le ocurre decir que él tiene tarjeta, bueno, no es de él, es de un familiar. ¿No son
compartamientos similares?
Un político mentiroso es tan nefasto o más que un político corrupto. Está claro que el corrupto es un mentiroso, pues para hacer sus
negocietes con la política ha tenido que mentir una y mil veces. Pero el político mentiroso puede acabar siendo un corrupto, que no son sólo los que meten la mano en la caja, sino aquellos que venden humo o que dan gato por liebre.
Saludos Ñeros.